Luego de innumerables protestas, reubicaciones fallidas, encontronazos policiales y actividades de reclamos para que se les permitiera trabajar, el presidente Luís Abinader dispuso el traslado temporal de vendedores de las pulgas hacia el Merca Santo Domingo, causando el disgusto de los comerciantes establecidos allí.
Las preocupaciones en torno a evitar la arrabalización y la acumulación de basura en el Merca SD son válidas, pero por el momento no existe otra salida viable para esos miles de trabajadores directos e indirectos que dependen del negocio de las pacas de ropas, y reventas de diferentes clases de mercancías que relocalizarse en el Merca SD.
Al mismo tiempo, los comerciantes del Merca SD pueden tomar provecho de la reubicación del Mercado de las Pulgas en esos terrenos, pues el negocio de las pulgas mueve cerca de $100 millones de pesos semanales, atraerá miles de nuevos compradores al Merca SD y revitalizará la economía de quienes venden alimentos, ropas, electrónicos y otras mercancías en ese lugar.
Es propicio que las autoridades faciliten un encuentro entre la Asociación de Comerciantes del Merca SD y la Asociación de Vendedores del Mercado de las Pulgas lo antes posible, para que en conjunto puedan dirimir las diferencias, subsanar desconfianzas e implementar medidas para mantener el orden, la higiene y la seguridad de negociantes y clientes por igual.
Coincidir en puntos de avenencias entre las partes contribuirá a conformar una poderosa alianza comercial en el Mercado de Santo Domingo, en aras de lograr que el derecho al trabajo le sea preservado a quienes se han mantenido durante casi un año, sin poder ganarse el sustento honradamente, debido a las trabas y prohibiciones a los cuales se les ha sometido.