Desde antes de existir la Dican, el departamento Antinarcóticos de la Policía estuvo en algunas controversias. Uno de esos alborotos que sacudió al gobierno lo fue en primer lugar, en el año 1981, que terminó con el desmantelamiento del citado departamento de la Policía Nacional. El entonces comandante de esa unidad, el ex coronel Aridio Descartes de Jesús Pérez, y otros agentes, fueron vinculados de hurtar dos kilos de cocaína valorados en 76 mil pesos, que la institución del orden había incautado, además se le acusó de robar 26 mil pesos y distraer cocaína del depósito a su cargo.
Otro evento que siguió desgastando la credibilidad de la Policia Nacional, lo fue el apresamiento en Santiago, en diciembre de 1983, del cantante Fernando Villalona, acusado de poseer marihuana y, luego dejado en libertad de la Fortaleza San Luis, porque se “determinó” que lo incautado en poder del cantante era “cilantro”.
Estos hechos bochornosos en la década del 80, apresuro al gobierno del presidente Joaquín Balaguer despojar a la Policía Nacional de combatir y perseguir en el territorio nacional el consumo de drogas narcóticas y, de promulgar en 1988, la Ley 50-88, que creó la DNCD, la cual tenía la exclusividad en el combate de drogas, hasta 2008, que dichas atribuciones será compartida con la creación de la Dican, por una Orden Especial Administrativa enumerada 024-2008, del 31 de mayo de ese año.
Tras su creación, la Dican ha estado envuelta en escándalos que involucran la desaparición de grandes volúmenes de drogas y denuncia de supuesta implantación de sustancias en los barrios, principalmente, a los jóvenes.
En el año 2010, el jefe de la Dican en la provincia Santiago, coronel Franklin Peralta, fue sorprendido, junto a unas 12 personas más, en una transacción de drogas y, según revelaron las autoridades, se daría tumbe a un agente de la DNCD.
Ese mismo año, el jefe antinarcóticos de la Policía en San Francisco de Macorís, mayor Miguel Rodríguez, fue apresado con 440 kilos de cocaína junto a otros cinco hombres.
A finales de diciembre de 2014, el capitán Gilberto Abreu Guzmán, quien era jefe de la Dican en Dajabón, fue apresado en Santiago con 24 libras de marihuana.
Uno de los mayores escándalos ocurrió a inicios de 2015, con la investigación del Ministerio Público sobre la desaparición de 1,200 kilos de cocaína incautados en diferentes operativos y no reportadas por agentes de la Dican.
El 14 de enero, 2015, El procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito, en conferencia de prensa afirmó que el extitular de la Dirección Central Antinarcóticos de la Policía (DICAN), coronel Carlos Fernando Valerio, tiene toda la responsabilidad con relación al robo de mil 200 kilos de droga.
El procurador general de la República definió a Fernández Valerio como un “narcotraficante” porque ordenaba incautar drogas para luego venderlas.
“Fernández Valerio tiene toda la responsabilidad en este caso, en los tipos penales como jefe de esta división policial, razón por la cual se ha llegado al punto más importante: la decisión de emitir orden de arresto contra él”, dijo.
Por ese caso, fue presentada medida de coerción contra el coronel Carlos Fernando Valerio, el exjefe de operaciones de DICAN; teniente coronel Félix Humberto Paulino López; los fiscales Máximo Díaz Ogando y Ramón Veras Castro, contra quienes el Ministerio Público dice tener pruebas contundentes que los vinculan de manera directa en acciones ilícitas en el desarrollo de sus funciones, junto a otros implicados a los que se les ha emitido orden de arresto.
Instituciones como la Alianza Dominicana Contra la Corrupción (Adocco) pedían la eliminación de la Dican, pues entendía que era contraria a la ley que creó la DNCD y que era un obstáculo en la lucha efectiva de persecución del macro y microtráfico.
Los onces miembros de la Policía Nacional citados por el Procurador General son, coronel paracaidista Carlos Fernández Valerio, Máximo Antonio Díaz Ogando, Ramón Augusto Veras Castro, mayor Ruddy José Japa Álvarez, primer teniente Barbaro Torres Beltrán, sargento mayor Antolín de los Santos Zabala, Pedro José Almanzar González, Agapito Muñoz Evangelista, Raidirys Lironey García Miranda, teniente coronel Félix Humberto López Paulino.
El procurador Domínguez Brito, informó que la sustancia sustraída en la citada operación fue utilizada para el pago de complicidad y silencio de todos los involucrados, tanto para los altos mandos policiales, como a los miembros del Ministerio Público.
Sobre la eliminación del Dican, dijo que los días por venir son los que determinarán esa decisión, “se hará lo que más convenga”.