Como a los dominicanos nos gusta hacer comparaciones, tanto en la pelota como en la política, hoy tenemos estas disyuntivas no muy agradables.
En la temporada 2018-2019 la Liga de Béisbol Dominicana (LIDOM) pretendía adjudicarle la dedicatoria de esa campaña al señor Leonardo Matos Berrido, armando un revuelo grandísimo porque este señor había sido acusado de asesinar a su esposa en octubre de 1982.
Por este caso, el señor Matos Berrido fue encarcelado durando un año, por asestarle un disparo en la nuca a su esposa Edith Gómez, pero (siendo en otros tiempos) fue puesto en libertad, ya que por presiones le quitaron la querella.
Fue entonces, cuando se cambia de idea y se le hace la dedicatoria al Salón de Fama de Cooperstown, Vladimir Guerrero Sr.
En un caso reciente, el pelotero de grandes Ligas Wander Franco, está siendo acusado de explotación sexual contra una mejor de edad, malogrando su carrera en el béisbol y dañando su hoja de vida.
En lo político, tenemos un señor de nombre Julio Rafael Romero Villar, aspirante a alcalde (2024) por Santo Domingo Este Fuerza del Pueblo. Este caballero fue acusado de violar a una menor de edad a la que embarazó.
Todo lo que vaya en contra de una mujer va a repercutir para siempre en la vida de quien lo perpetre. Como han sido estos casos, por mencionar algunos.
En el caso “Romero”, la Junta Central Electoral debiera pronunciarse e invalidar esta candidatura para que se consolide la confianza en el pueblo dominicano.
Habría que hacerle un llamado al doctor Leonel Fernández Reyna, que desista de estar presentando al señor Julio Romero como gran candidato a alcalde por esa demarcación, ya que la ciudadanía se lo va a cobrar con creces. Como pasó en los casos anteriores.