Como era de esperarse, la advertencia realizada por el gobierno de Estados Unidos a traves de su Embajada aqui, para que los ciudadanos que vienen al país a realizarze procedimientos estéticos y reconstructivos sean cuidadosos por las muertes de estadounidenses en esos centros, generó reacciónes nacional e internacionalmente.
La Sociedad de Cirugía Plástica y Reconstructiva (SODOCIPRE) se pronunció con rapidéz indicando que el constante auge de personas que visitan el país para obtener ese tipo de servicios profesionales demuestran que los centros médicos estéticos son muy seguros
La Embajada dice que una investigación del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades norteamericano (CDC), contabilizó la muerte de 93 ciudadanos estadounidenses que se sometieron a cirugías plásticas o reconstructivas en clínicas dominicanas entre los años 2009 y 2022, lo cual representa un promedio de 7 muertes por año.
Lo ideal es que no ocurra ni una muerte, pero si como expresa SODOCIPRE en torno a que sólo el año pasado (2023), registraron un total de 40 mil cirugías, entonces el porcentaje de que hablan los CDC no es extraordinariamente alto para levantar esa polvareda mundial presentando a los médicos dominicanos como carniceros peligrosos.
Los centros especializados en cirugías plásticas y reconstructivas deben hacer esfuerzos para ofrecer sus servicios dentro de los más altos estándares profesionales pero, tambien sabemos que muchas denuncias de este tipo, encubren una feroz competencia médica internacional por cuotas de un mercado que crece y genera beneficios multimillonarios.
